atraviesa el viento un pincel que va moldeando los días y que se instala en un palio para alquilar la cosecha de sus viajes, el detalle de su tiempo
CASA
Vivo en una cama
cuatro paredes
dos manos
y dos piernas
hay un par de ventanas grandes en tus ojos
con una vista constante desde las almohadas
a la playa en tu espalda
y una puerta entre las sábanas
que me lleva hasta donde tu estás.
Tengo una mesa de caricias
donde como de tu boca varias veces al día
y un corazón redondo
que uso de alacena para guardar tus cosas.
En los días que me aburro
prendo tu sonrisa para ver que está tramando tu belleza
cuando llueve y hace frío, me arropo entre tus brazos
para mirar las hojas de tu pelo agitarse con el sueño.
Suelo hacer largos recorridos por los pasillos de tu cuerpo sin
descansar,
en tu ombligo tengo un jardín de trigo
de calendario el verbo amar
y de fondo pido música de algún cuadro de Folgar.
Cuando me llama la soledad
le digo que siento mucho mi ausencia.
Las cosas sin importancia las recoge el olvido a domicilio
y por las que lucho adornan los salones de mi rutina.
Al final de cada jornada muero por ti
por regresar donde vivo
a esas cuatro paredes
con ese par de ventanas
y esa vista constante
a ese palacio entre sábanas
donde sé que me esperas,
aunque yo no vista de azul
tú sigues siendo princesa.
Yo vivo en la casa ocho.
LA VUELTA AL MUNDO EN 80 COPAS
Este poema tiene un par de copas de más
cuando el Nunca Jamás dejó de ser un país
para convertirse en una promesa de lunes
que no puedo cumplir un viernes.
Esta rima es una invitación a la segunda ronda
a dar la vuelta al mundo en ochenta copas
a perder el duelo contra el desvelo
a ponerle baterías a mis malas compañías.
Este verso es un vaso que reta a mis ganas
cuando en el circo de las barras
cada trago es un salto mortal doble y en las rocas
que se ejecuta sin red
para que nos aplauda un payaso
que al final de la función tiene sed
y se ve exactamente igual o peor que uno mismo.
Esta rima es la pena capital en los cigarros
el psicólogo en mis tragos
el político en mis finanzas
el mal paso en las contradanzas
el huésped que se queda
la Absolut resaca que te espera
el domingo que no llegó
el escusado que no te excusó.
Esta oda esta mezclada con soda
Y tiene forma de botella
es una cualquiera que va de boca en boca
que pone mi mano bajo su falda corta
y me propone una noche sin ropa
que termina perdiendo la vergüenza y la elegancia
cuando mi carro es una ambulancia
y mi dormitorio una sala de emergencia.
Esta rima es la vida que se insulta
la carretera que no lleva a la felicidad
la inmadurez adulta
la casa sin hogar
la mujer que se apuesta en un bar
las ojeras de tu antifaz
la nota que dejan cada vez que te vas
el cisne que se quedó bailando en algún vals.
Este poema es tan solo otra forma de decir salud.
EL TEATRO DEL MAL GUSTO
Se sube el telón
Comienza un narrador que se escucha cansado.
Escena 1: Introducción – La Bienvenida al Héroe al Villano y a Usted
Estos son días pequeños de tragedia
en los que el descaro se viste de corbata
la tentación lleva un escote barato que sugiere acción
pues quien se libra del pecado en esto tiempos
es un prófugo de la piel y de esta ley moderna
en la que no hay mal que por bien no venga.
Escena 2: El Agujero en el Telón (Musical – La Intriga del Libreto)
Ya no hay días de inocencia
la moral dejo su rutina
por todos lados se ve la tristeza en los escaparates
hay rostros con las ruinas de una sonrisa
se regala en ramos el insulto
se vende el orgullo por libra
y el pretexto es la musa apropiada de los mentirosos.
En estos días se abre la boca para aplaudir los fracasos
se cierra la mente para ignorar las opiniones
pues está de moda ser inigualable
y por si fuera poco
el ignorante es elogiado
atractivo
el mejor de los amantes.
Escena 3: La Comedia
Los niños juegan con la infancia como ancianos
la juventud sin pudor perdió la personalidad
en una apuesta a cambio de la experiencia.
Escena 4: Un Dialogo Entre Camaradas (Casi un Monologo)
La simpatía se cayó de los bolsillos
los llamados amigos son solo una teoría
un antídoto que se recomienda en pequeñas dosis de confianza
porque estrechar la mano muerde
y los enemigos son gratuitos.
Escena Final: La Tragedia
Estos son tiempos
que se roba el calendario
para vestir una cruz
tener una corona de espinas
de marca exclusiva
comprada por televisión en horario nocturno
para negociar la esperanza
que no incluye baterías.
La desilusión no tiene analgésicos
cuando el amor se ha vuelto cobarde
y el corazón pierde su ropa interior.
Colofón
Cae el villano por la borda
el héroe despide al tren que va a ninguna parte.
Se baja el telón.
¿FIN?
EL IMPERIO DEL SOL
Ven al imperio del sol
dime lo que ves.
Imagina
hombres que mueren
para vestirse de cuervos
ángeles que escriben versos
para entender la vida
y cien poetas que buscan la noche
que murió con el amanecer.
Ven al imperio donde nadie te espera
imagina
el cielo en sequía
el rostro que escondo
las ironías del olvido
y las huellas de un corazón en ruinas.
Veras el desconsuelo
que se guarda en un secreto
el precio de los sueños
y el pecado que destruye
la locura del amor.
Ven al imperio del sol
del otro lado del cielo
donde nunca fui perfecto
donde el tiempo
es un ladrón de los recuerdos
y la soledad
lleva las almas heridas por la tristeza
a un lugar donde se quitan las alas
y pueden volar.
Ven al imperio del sol
ya nunca tendrás que volver.
EL DÍA DEL ESPANTAPÁJAROS
Es usted amigo mío,
víctima de las burlas de un pájaro negro,
del suelo que lo mantiene clavado
para darle una personalidad de hombre callado
que tiene un alma de palo,
y un oficio que no es muy bien pagado.
Aunque no se ve nada agotado
de ver su sonrisa marchita
irónica
no evita el acecho de algún cuervo
que se acomoda en su mano de cuando en cuando,
para dar aviso a otro villano
que usted no es nada más que un héroe de trapo,
quien posa frente al sol su rostro de cartón
con una vestimenta poco elegante que la lluvia le acomodó,
para cubrirle la tentación
de cambiar un par de clavos por un corazón
quizá hasta para estrechar más fuerte el saludo al viento,
que pasa por su rutina para llevarse tan lejos el aburrimiento
ese que yo siento cuando quiero ser libre,
porque la vida pide en muchas ocasiones
lo que no se puede dar.
Se lo digo buen amigo
yo, el caballero del disfraz,
que no aprendió a espantar sus heridas
en este campo del olvido
donde me mantengo clavado en soledad.
PRIMER DÍA DE MARZO
Quisiera tanto venderte la idea de amarme,
y tramar juntos toda la vida
un plan de amor exclusivo entre sábanas,
en algún rincón lejano del mundo,
que podría ser nuestra cama.
Por la noche te iría a buscar hasta tu almohada,
tocaría la puerta
al ver que estas soñando,
rompería tu descanso
como quien quiebra una ola.
A las cosas del corazón no les llamaríamos amor,
les inventaríamos otros nombres
les desvestiríamos el cuerpo
les pondríamos música,
las secaríamos como ropa al viento,
les daríamos hijos
un hogar.
Las platicaríamos despacio
porque el tiempo en estos casos no importa,
y seríamos cómplices bajo palabra.
Por la mañana,
cuando las líneas de mi poesía se terminarán,
me vestiría de miradas para abrazarte,
esperando a que despiertes
para ser de tu boca el pan de cada día.
Me bastaría con ser el espectador,
verte tan hermosa,
radiante,
brillando como siempre,
tan sencilla y cotidiana,
tan imperfecta como la naturaleza misma,
tan valiosa e ideal.
Me convertiría en la envidia de las calles
el sol sería un juez amante,
morirían de celo el trigo
la leche,
las manos
las flores,
el calendario y el olvido.
Pues yo sería ese viento que tiene una casa en tus suspiros,
soy aquel que te vendió las ventajas del amor.
*** Textos extraídos de Versos en alquiler (Letra Negra, 2012)
21 de febrero de 2012
1978, Guatemala Ciudad, Honduras, La Ceiba, poesía